Durante muchísimos viernes posteriores ( fueron años ) a nuestra graduación tuvimos el enorme privilegio de juntarnos entre ex-compañeros y saber de nosotros y hacer un poco de catarsis y de psicología de café . Esos Viernes a la nocha eran sagrados , estaban en el primer lugar en el orden de prioridades a la hora de decidir que hacer en esa noche que arrancaba tipo 22 a 22,30 y que iba terminando en la madrugada de Sábado .
Ese café ubicado en Estados Unidos esquina Bernardo de Irigoyen se transformó en un culto para muchos ex-compañeros al principio y pocos ( contados con los dedos de una mano ) al final ya que los años , las obligaciones maritales y la vida misma nos fue alejando de esa rutina .
El café sólo o cortado que duraban horas en las mesas seguramente no debe haber sido un gran negocio para esos mozos de estirpe gallega que nos acompañan esas noches .
Ese lugar que hubiera merecido un tango en otra época no se si existe en la actualidad pero sin duda merece un lugar destacado en nuestras vidas ...horas y horas hemos compartido en ese lugar , sino que los digan los Dieces ..Los Tarelos ....Los Collineces ..Los PerezPosios ..los Giottos ..Los Roas y Longos ... y tantos otros que pasaron por el lugar .
Muchas veces esa juntada era trampolín de otra salida nocturna más extensa como ir a bailar o a un bowling /pool o quizás una trampita para los que estaban flechados por cupido , pero fue cuna de nuestra juventud , de nuestros éxitos y fracasos .
Recuerdo aún esas mesas rellenas en el centro con ceramicos que le daban un toque colonial pero que con el paso del tiempo iban acunando miles de desperdicios que no podían limpiarse .
En la actualidad ( las fotos así lo demuestran ) ese lugar sigue funcionando ya sin las reuniones de ex-alumnos de antaño pero con los recuerdos de nuestras vivencias impregnadas en sus paredes.
Fui alumno del Pueyrredon y desde 2016 tengo horas de clase como profesor. Desde 2019 doy tres horas de Antropología y tengo una hora puente, la cual muchas veces la paso en el Musel mientras consumo un agua y un tostado. Este bar, que cuando era alumno no frecuente, veía a veces a algunas/os docentes en su interior cuando me retiraba a mi hogar. Es un buen bar. Atienden correctamente y tienen precios razonables.
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