A las muy bien detalladas descripciones de Marcelo Tarelo quiero recordar algunas cositas más . Esa quinta nos acompañó durante parte de nuestra adolescencia y fue refugio de nuestras escapadas de fines de semana futboleros y de veranos necesitados de una pileta y un poco de fresco .
Esa quinta tenía aparte de la canchita de fútbol , una cancha de tenis de pasto y una pileta bastante grande y con buena profundidad .
La familia de Roberto merece un apartado especial porque tanto la madre (excelente mujer) y su Padre (lamentablemente fallecido ya hace muchos años ) nos recibieron con la mejor predisposición . También sus hermanos ( 3 ) fueron compiches en muchos momentos y aunque disputabamos con el más chico la presencia con sus compañeros de colegio , la quinta nunca nos defraudó .
Hemos jugado cientos de partidos de fútbol , hemos hecho desafíos y hasta torneos contra amigos de los amigos .
Recuerdo un partido desafío contra un equipo de mi hermano Eduardo .
Ya habíamos terminado la secundaria y el partido estaba programado para el Sábado a la mañana tipo 10 , esa noche previa salímos de joda con la idea de volver temprano a dormir a la quinta , pero debemos haber vuelto a la siete ( ya de día ) y con la compañia de una damajuana de 5 litros de vino tinto .
Intentamos dormir algo pero entre trago y trago se nos hizo la hora del partido . Teníamos un euqipo diezmado por las ausencias , fundamentalmente la de nuestra arquero titular : Marcelo Tarelo que seguramente tenía una mejor opción a la de jugar un partido de fútbol matinal .
No llegabamos a completar los 7 jugadores , porque estaban Roberto " Madera Outes " Collinet , Nelson " Rojaijú " Roa , Gustavo " Il Capo " Diez , El Abuelo Perez Posio , Robertito "El Heber " Longo y yo " Olarán " .
Al Arco jugó un prestado del otro equipo que resultó ser la figura de la cancha .
Con muy pocas pilas y mucho alcohol en sangre empezó el partido contra un equipo que jugaba siempre ..que traían sus camisetas verdes ..botines de primera ...una pinturita ..versus los nuestros que eran un rejunte de voluntades
con muy poca habilidad en los pieces ( salvo Gustavito ) pero con mucha garra y espiritu ...jugabamos con una línea de seís ..o sea los 6 jugadores de campo metidos atrás porque nuestras piernas no daban para mucho tiempo .
Pero entre los goles perdidos por nuestro rival de turno y las salvadas de esa improvisado arquero que jugó a muerte versus sus amigos motivado en haber sido descartado entre los titulares de su equipo ..pudimos salvarnos de una goleada en los primeros minutos .
El tiempo transcurría y el 0 a 0 ya no daba para más porque evidentemente la adrenalina y el alcohol en nuestra sangre despertó nuestros corazones y le propinamos una goleada histórica a ese gran equipo rival .
El 5 a 1 fue una cachetada de esos chiquilines insolentes y borrachos que osados pasaron por encima a los más grandes ( en promedio los rivales tenían 3 a 5 años más ) . Los festejos siguieron luego del partido con unos nuevos tragitos de esa caliente damajuana que había quedado debajo de un árbol .
La alegría se fue apagando con la modorra y terminamos todos durmiendo bajo la sombrita de esos enormes pinos que bordeaban la cancha .
De esa historias hay cientas ... Partidos la por mayor ...bailes de disfraces ..cumpleaños ...juntadas ..tardes ...días completos ..asados ...
Esa quinta tiene que ser un mausoleo sagrado ya que hizo la felicidad de muchos chicos por décadas .
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